viernes, 23 de agosto de 2013

Impunidad y violencia de género

No deja de llamarme la atención. Como todos, tengo una amiga que es más bien apática a todas las cuestiones politiqueras y sociales, pero que incluso ella se encuentre indignada por la liberación de un cura asesino y violador de una menor, más o menos da una idea de lo grave del asunto.

La joven Shantal no regresó a su casa el fin de semana luego de la escuela, en octubre de 2007. Ella estudiaba en el Colegio Salesiano en San Luis Potosí, una de las escuelas privadas de mayor renombre (y poder económico) de la capital potosina, parte de una asociación internacional de colegios de este tipo.

Total, que la niña no vuelve, y el siguiente día hábil en la escuela encuentran su cadáver, tras varios días de haber fallecido. La descubren entre las colchonetas de gimnasia, su cuerpo con signos de violencia sexual y física, golpes en la cabeza y señales de haber sido asfixiada.

Una escuela con tanto dinero y que tiene entre sus estudiantes a hijos de políticos "gordos" tiene, por necesidad lógica, un sistema de vigilancia con cámaras, guardia permanente y toda la cosa.

Y aún así, las grabaciones desaparecieron y nadie vió nada.

Poco después, un policía que fue removido revela parte de la investigación, incluso fotos periciales del cuerpo y afirma tajante que uno de los curas fue el asesino y violador, tanto por las declaraciones de amigos de la víctima sobre su relación con ella, como por las mismas investigaciones periciales donde se comprueba que el asesino es zurdo, tiene acceso libre al sitio donde se encontró el cadáver y además la capacidad de eliminar las pruebas electrónicas que podrían haberlo inculpado sin remedio.

Lo tratan de matar, claro.

Y después, no lo bajan de un "resentido" blablabla.


De Julio Ceballos todos podemos decir muchas cosas, descalificar sus modos y demas, pero no su capacidad policial. Es (o era, cuando trabajaba en la policía) uno de los pocos que sí se tomaban en serio sus capacitaciones y su trabajo. Podría decirse que era un verdadero friki de la criminología.

por eso, sus señalamientos no deben tomarse a la ligera. Pues bien, el asesinato sucedió en un sexenio en que San Luis se volvió poco menos que un estado confesional, usando dinero público para financiar escuelas privadas, el seminario local e incluso cambiando el nombre de las calles para que fueran más acorde con el pensamiento religioso de la clase gobernante.

Incluso, cuando se cambió el color del gobierno, no actuaron de inmediato contra el cura sospechoso, sino hasta que necesitaban algo para cubrir la ola de acusaciones de corrupción del nuevo régimen.

Acto seguido, los salesianos "muestran su músculo", hacen marchar a sus niños a favor del cura.

Y ahí van, un montón de niños caminando pidiendo por un violador y asesino... de niños...

Hermoso, San Luis Potosí...

Hace unos días dejan libre al curita, "por falta de pruebas".

En serio, ¿y así quieren ustedes que uno confíe en la imparcialidad de las autoridades?

¿Así quieren que uno crea que sus intenciones son "proteger y servir?

Con eso sólo demuestran que la policía y el gobierno sólo sirve al que tiene dinero para pagar campañas, no al pueblo que los elige y paga sus infladísimos salarios.

¿Cuantos más agravios? A esa niña no la bajaron durante semanas de "una puta" que sedujo al cura, como si con eso disculparan que la matara. Al joven que murió en los separos hace una semana no lo bajaban de un pandillero porque en la foto de su facebook parecía "cholo" según las buenas conciencias potosinas, y al final se descubrió que no sólo murió de los golpes dados durante el arresto, sino que ni siquiera estaba relacionado con el delito que se le imputaba, y sólo se le detuvo porque fue señalado tras un interrogatorio "hostil" a dos delincuentes atrapados en flagrancia.

Sólo al niño de Ciudad Valles no lo trataron como "peligroso maleante" porque entonces sí, toda la colonia que lo conocía se hubiera levantado en armas.

Aunque igual lo mataron.

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